Y no parece que la cosa vaya cambiar a corto plazo.
Nuevo partido perdido, nuevamente ante otro rival más que asequible y otros tres puntos que vuelan de nuestro campo. Estos son los puntos que al final de temporada se echan de menos.
En cuanto al encuentro, y como casi siempre, no fue un mal partido del equipo.
Empezamos bien, con control en el centro del campo y alguna llegada peligrosa. Pero como viene siendo tónica habitual, el juego del equipo se diluyó con el paso de los minutos y el rival, sin mostrar nada especial, se hace con el mando, con las mejores ocasiones (destacar la actuación de nuestro portero Miguel, sin lugar a dudas, el mejor del partido con diferencia) y finalmente con el resultado.
El equipo tiene que reflexionar y, bajo mi opinión, concentrarse en los inicios de partido para coger una ventaja amplia en el marcador (normalmente opciones de ello, las hay) y luego administrarla cuando las fuerzas empiezan a fallar. Creo que este es el camino. ¿Y vosotros?.
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